Yo diría que es un acto reflejo del siglo pasado, Viruta, la gente se mete en las salas de cine equis subrepticiamente y se acerca al kiosco donde venden la revista porno pidiendo el diario para disimular. Se olvidan, como mínimo, que estamos en el siglo veintiuno. Igual tampoco tengo nada contra el voyeurismo.
Juaz... yo me hago cargo de mi voyeurismo... pero más que nada x que no se me ocurre que comentar... jeje Ahora tampoco... solo que disfruté mucho mirar...
Hola Paula: Complicado esto del voyeurismo, digo, porque dentro de la virtualidad es aún mas concreto aquello de "se mira y no se toca". En la vida real, al menos, cabe la posibilidad de arrepentirse de ser un mero observador y poner una mano encima del observado. Aunque también es cierto que, en ambos casos, depende de lo que uno quiera tocar (o tocarse).
4 comentarios:
a la pipetuá!
me dá mucha gracia que nadie se atreva a dejarte comentarios aquí.
y pa' que negarlo, también me dan nervios!
pd: ahora le dicen nervios?
Yo diría que es un acto reflejo del siglo pasado, Viruta, la gente se mete en las salas de cine equis subrepticiamente y se acerca al kiosco donde venden la revista porno pidiendo el diario para disimular. Se olvidan, como mínimo, que estamos en el siglo veintiuno. Igual tampoco tengo nada contra el voyeurismo.
Juaz... yo me hago cargo de mi voyeurismo... pero más que nada x que no se me ocurre que comentar... jeje
Ahora tampoco... solo que disfruté mucho mirar...
Saludos!
Hola Paula:
Complicado esto del voyeurismo, digo, porque dentro de la virtualidad es aún mas concreto aquello de "se mira y no se toca". En la vida real, al menos, cabe la posibilidad de arrepentirse de ser un mero observador y poner una mano encima del observado. Aunque también es cierto que, en ambos casos, depende de lo que uno quiera tocar (o tocarse).
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